Tipos de créditos bancarios, es la operación financiera por la cual la entidad pone a disposición del cliente una suma de dinero con un límite de tiempo y cantidad determinada y establecida en el contrato para su devolución.
El dinero disponible es administrado por el cliente, por lo tanto el cliente puede cancelar su deuda cuando lo crea conveniente, siempre antes de su vencimiento.
Tipos de créditos bancarios: hipotecarios
El hipotecario es uno de los Tipos de créditos bancarios caracterizado por su pedido para adquirir un inmueble, para la construcción de una vivienda o para la adquisición de un terreno.
Por lo general su vencimiento ronda los 20 años.
También se caracteriza porque esa adquisición es la garantía de devolución del crédito otorgado.
Tradicionales:
Los tradicionales son los préstamos personales que no pueden superar un límite establecido y su devolución se realiza a partir de cuotas determinadas y concordadas con el cliente.
Pignoraticio:
El llamado pignoraticio es uno de los Tipos de créditos bancarios que se caracteriza porque se toma en garantía un objeto de valor como una joya o varias de ellas u obras de arte.
Territorial:
El territorial exige una garantía de naturaleza real como un inmueble.
Por un lado podría parecerse a uno hipotecario, pero difiere a éste debido a ciertas condiciones que las puede estipular la entidad crediticia.
Comercial:
El comercial es uno de los Tipos de créditos bancarios comunes que solicitan las empresas sin importar su tamaño para aumentar su liquidez. Es otorgado por un banco, por lo general se estipula una devolución a corto plazo no mayor a los cuatro años.
Tarjetas de crédito:
Las tarjetas de crédito también son otro tipo de estos créditos que son mayormente utilizadas por los consumidores comunes. Si bien son de gran flexibilidad sus intereses son altos y por otra parte toda tarjeta cuenta con un límite de gastos mensuales.
Prendario:
Es un dinero que es entregado por el banco a un persona jurídica o física para la compra de un bien mueble, el cual debe ser aprobado por el banco para poder ser comprado, ya que este bien que se va a comprar quedará prendado hasta tanto sea saldada la deuda con el banco. Por lo tanto al quedar prendado el bien, el cliente solo puede hacer uso de él pero no puede venderlo.
Mini-crédito:
Como la palabra lo anticipa el mini-crédito es un crédito de una suma de dinero pequeña, se otorga de forma rápida, pues su aprobación es ágil pero tan rápida también puede ser su denegación. Por otra parte es uno de los créditos con tasas de intereses más altas.
Línea de crédito:
Línea de crédito significa que el banco pone a disposición del cliente una suma de dinero máxima para que haga uso de ella o no la utilice. Esa suma de dinero está a disposición del cliente quien decide si va a utilizarla.
Pero una vez que se encuentra a disposición comienzan a correr los intereses, sea utilizado o no ese dinero, ya que el crédito se encuentra vigente. Por ello los intereses por lo general son bastante altos.
La única ventaja para el cliente es saber que si lo necesita cuenta con un banco que le ha otorgado un crédito y que puede disponer de él cuando o necesite, pero mientas tanto deberá pagar los intereses que correspondan.
Por ello no es lo más conveniente para cualquier empresa y mucho menos para un consumidor común.
Puedes visitar: tipos de tarjetas de crédito.
[…] Se orienta a empresas con solvencia porque las líneas de crédito generan intereses que deben ser abonados a pesar de no utilizar este crédito, pero el dueño de la empresa sabe que contará con dinero en efectivo cuando lo necesite. Para ampliar esta información puedes leer: tipos de créditos bancarios. […]